Aislamiento social y desinfección de ayudas técnicas son algunas de las acciones recomendadas, en términos generales, por la directora de Terapia Ocupacional de la sede Temuco, Soledad Henríquez, quien además destaca el rol de los cuidadores durante esta emergencia.

Con el fin de prevenir el contagio del nuevo Coronavirus, la directora de la carrera de Terapia Ocupacional de la Universidad Mayor sede Temuco, Soledad Henríquez, entregó una serie de recomendaciones generales para las personas con discapacidad, donde además de extremar medidas de higiene, se debe equilibrar rutinas.   

“La higiene permanente es clave en este proceso, complementado con el aislamiento social que indica la cuarentena, para proteger la condición de salud de personas que presentan factores de riesgo asociado a la discapacidad, disminuyendo la probabilidad de contagio”, precisa la académica.

Una de las recomendaciones más importantes, es el proceso de limpieza diario de ayudas técnicas que apoyan el desplazamiento de las personas, como sillas de ruedas, andadores y bastones, que están en constante contacto con las manos. “Estas deben ser sanitizadas una vez que son utilizadas, para mantener los procesos de higiene”, explica la directora de carrera.

Asimismo, ayudas técnicas, tanto visuales como auditivas, deben seguir sus protocolos de limpieza. “Órtesis y adaptaciones, también deben desinfectarse al momento de utilizarlas, con los materiales que el servicio de salud ha indicado en beneficio de evitar la propagación de este virus”, agrega.

Además, la académica recomienda abrir las ventanas de piezas y espacios comunes, ya que facilita la ventilación de las mucosas y mejora el clima en el interior del hogar. Pero, por sobre todo, tener las precauciones necesarias en cumplir con el lavado de manos y la distancia respectiva indicada en espacios públicos con otras personas.

Cuidadores

Hoy, el rol del cuidador genera una responsabilidad vital y determinante en cada una de las personas que tienen a su cargo y que vivencian algún tipo de discapacidad, ya sea física, sensorial o mental.

Es por esto que “las medidas de higiene que deben mantener, así como las de seguridad, de empatía y de disposición en la ayuda al otro, son fundamentales en este proceso, debiendo aplicarlas en su diario vivir”, precisa la directora de Terapia Ocupacional.

Por el contrario, acciones de riesgo, como frecuentar lugares con alta aglomeración, no utilizar medidas de seguridad sanitaria, no cumplir con higiene de manos y uso de guantes y mascarillas, en casos puntuales de mayor necesidad, se deben evitar, ya que complicarían situaciones de salud de personas con mayor vulnerabilidad.

Rutina y teletrabajo

Entendiendo que esta situación es más estresante de lo normal, Soledad Henríquez dice que “lo importante es tratar de generar un equilibrio ocupacional en las rutinas que se manejan al interior de la casa, a través de actividades que proporcionen relajo y disfrute, así como el tiempo destinado al propio autocuidado y cuidado de otros”.

Sobre el teletrabajo, agrega que se deben establecer límites horarios, donde además se realicen pausas con el fin de poder cumplir con el rol profesional, sin descuidar la salud.

“El generar espacios físicos, distintos para cada actividad, puede ser un aspecto facilitador y organizador en las actividades que desempeña una persona durante el día, evitando con esto afecciones de salud, tanto física como mental, distribuyendo de manera óptima y significativa los tiempos, espacios y actividades que exige la rutina”, complementa.