SALUD//Isapres: ¿Qué medidas pueden tomar los afiliados para evitar el alza del precio de sus planes de salud?

El abogado y docente de la carrera de Derecho de la Universidad Mayor sede Temuco, Manuel Espinoza, dice que “lo más práctico es interponer un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones”. Asimismo, agrega que voluntad política sería clave para finalizar con cobros abusivos.   

Malestar provocó entre los afiliados y en el mundo político, de manera transversal, la decisión de las Isapres de encarecer sus planes en 4,5% promedio a partir de julio, tanto así que el propio presidente Sebastián Piñera tuvo que intervenir pidiendo un “gesto” a las aseguradoras, las que decidieron postergar el cobro por tres meses.

Pero, ¿qué pueden hacer las personas ante este anuncio que se realiza en medio de la peor pandemia que ha enfrentado el país? Manuel Espinoza, abogado y docente de la carrera de Derecho de la Universidad Mayor sede Temuco, entrega luces sobre las medidas que podrían emprender los afiliados para dejar sin efecto esta alza.

Lo primero, dice el académico, es entender que en Chile la propia ley de Isapres faculta a las instituciones de salud previsional, para que una vez al año revisen los precios de los planes y apliquen porcentajes de alza por las prestaciones que están cubriendo.

No obstante, y a pesar de que la ley las faculta, el abogado señala que “desde hace una década que los afiliados interponen ante la Corte de Apelaciones, lo que se llama un recurso de protección, para que ésta revise si el alza que aplicó la isapre tiene fundamento plausible”.

—Y, ¿cuál es la respuesta que reciben de los Tribunales?

—Yo diría, pensando en que siempre hay un margen de duda, que en un 99,9% acogen estos recursos, puesto que estiman que los fundamentos que ha puesto la isapre para justificar el alza, son fundamentos generales que no explican absolutamente nada y que en definitiva transforman esta alza en una sin justificación real.

—Entonces, ¿la clave sería el recurso de protección?

—Lo más práctico, lo más rápido, es que el afiliado interponga un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones que corresponda a su domicilio. Si bien la ley no exige que estos recursos de protección sean patrocinados por un abogado, el afiliado puede elegir hacerlo por medio de uno, porque, por regla general, jamás tendrá que pagar los costos de un abogado por esta gestión, ya que los termina pagando la Isapre.

—El presidente Piñera intervino para que el alza, finalmente, se postergara por tres meses. En ese sentido, ¿con qué herramientas jurídicas cuenta el Gobierno para no depender de “gestos” de las aseguradoras?

—El Gobierno siempre tiene “el sartén por el mango”, pero el problema es que a veces no hay voluntad política para hacer las cosas. ¿Por qué? Porque, bastaría con que el Gobierno enviara un proyecto de ley donde derogue el artículo de la ley de Isapres que les permite a éstas subir los planes de salud. Es muy sencillo, pero el problema es que nadie ha tenido la voluntad política para hacerlo. Y no solo este gobierno, también los anteriores. 

Aumento en los reclamos

Hace una década, Manuel Espinoza se convirtió en el primer abogado en Temuco en presentar recursos contra las Isapres por este tema. Desde entonces, ha visto cómo ha aumentado la judicialización de estos reclamos. “Al principio debe haber sido un 5% de la población”, dice.

Pero, con el pasar de los años, “hay cálculos que indican que un 35% de las personas está reclamando judicialmente por estas alzas arbitrarias que imponen las Isapres”, añade el docente, quien se muestra sorprendido de que aún, a pesar de los fallos favorables a los afiliados, continúen estas alzas.

“Yo estimo que para las Isapres todavía es un buen negocio subir los planes de salud, porque supongamos que por las alzas recauden 10 millones de dólares y por costas de procesos paguen solo uno. Entonces, desde ese punto de vista, es un negocio redondo”, precisa Espinoza.  

—¿Qué pasa con las utilidades de las Isapres?

—Todos los años las Isapres están obligadas a entregar las memorias de sus resultados financieros. Y si revisas, las ganancias han ido subiendo año a año. Es decir, si las Isapres nos dijeran: “La verdad es que vamos a tener que subir los planes de salud, porque por tres ejercicios consecutivos hemos venido trabajando a pérdida o con un margen de utilidad muy menor”, ahí podrían, a lo mejor, entrar a justificarse. Pero, las utilidades, históricamente, han ido al alza.

—¿Cuál es el fin de una isapre, entonces? ¿Le es lícito tener un fin comercial por sobre uno solidario tratándose de un sistema de salud, aunque sea privado?

—Lo que pasa es que el sistema de salud privado en Chile, es uno basado en el lucro y eso está permitido, porque las Isapres son sociedades anónimas y por ley, el principal objetivo que tienen las sociedades anónimas, es perseguir ánimo de lucro. Entonces, el fundamento de la isapre no es un tema de solidaridad, no es un tema sanitario, no es un tema de procurar la mejor salud para la población, sino que, derechamente, es una compañía aseguradora. El funcionamiento de una isapre está concebido en Chile como un negocio con ánimo de lucro.