Pandemia// Académicos crean modelo matemático que sugiere que no habrá “peak” de contagios por Covid-19 en el país si se mantienen medidas de confinamiento

Científicos de la U. Mayor y la USACH diseñaron esta herramienta para observar qué es lo que ocurre durante los distintos tipos de cuarentena y adelantarse a los eventos de contagio. Así, su resultado se contrapone totalmente a la hipótesis de otros científicos y actores: que en algún momento se producirá un máximo de casos. Además, establecieron que la enfermedad se encuentra hoy en un “estado estacionario”.

 

Un grupo de académicos de la U. Mayor y la U. de Santiago diseñaron un modelo matemático para observar qué es lo que ocurre durante los distintos tipos de cuarentena y adelantarse a los eventos de contagio en el contexto de la pandemia por COVID-19. Así, su resultado se contrapone a la hipótesis inicial: que en algún momento se produciría un máximo de casos activos y que sería necesario un confinamiento total para frenar la progresión. Estos científicos, en cambio, sugieren que la enfermedad se encontraría hoy en un “estado estacionario”.

Uno de los principales resultados arrojados por las ecuaciones es que en Chile, si se mantienen los niveles de confinamiento y medidas preventivas, no se produciría un gran “peak” de activos por la enfermedad en el largo plazo. Esto, a diferencia de las hipótesis de otros científicos, incluso de actores importantes de la vida pública, quienes han apostado porque este nivel máximo de activos podría tener lugar en mayo o junio, lo que haría colapsar el sistema de salud.

“Junto con los académicos de la USACH Francisco Melo y Juan Francisco Fuentealba, hemos estado empleando modelos matemáticos para comprender procesos biológicos. En ese contexto, no lográbamos entender por qué todos hablaban de que se produciría un ‘peak’, cuando los datos mostraban otra cosa”, señala Andrés Rivas Pardo, biólogo e investigador del Centro de Genómica y Bioinformática de la Universidad Mayor, quien remarca que otros modelos científicos que se han diseñado en el país parecen no considerar efectos estabilizadores de la pandemia.

Así, hace un par de semanas el equipo comenzó a diseñar un modelo matemático para poder explicar cómo funcionan las reglas de confinamiento. “Tomamos varios valores de los parámetros de confinamiento y los fuimos cambiando de forma gradual, lo que fue arrojando resultados que permiten entender lo que pasa cuando existe un confinamiento leve, uno intermedio y uno total.  De esa manera, logramos encontrar una regla simple que determina el confinamiento necesario para detener la progresión”, detalla Rivas Pardo.

A medida que fueron complejizando la herramienta, los científicos confirmaron lo que hoy, a su juicio, está ocurriendo: hay una misma cantidad de casos nuevos y de personas recuperadas por día, lo que aseguraría que el sistema de salud no colapse, pues este se encontraría en un “equilibrio” de tasas diarias o flujos. “Sin embargo, este equilibrio sería global, ya que algunas comunas y ciudades están claramente creciendo”, sostienen.

Según sugieren los investigadores, la condición para que no exista un “peak” y que el número de nuevos contagiados y recuperados se mantenga en equilibrio, se basa en no relajar el nivel de confinamiento que se tenía hasta el fin de semana recién pasado.

“Los números de activos van a estabilizarse o disminuir si respetamos algunas reglas de control estricto, pero no totales.  Sin embargo, puede ocurrir una catástrofe si controlamos equivocadamente hoy. Y ese control se desarrolla diseñando ciertos criterios cuyas líneas generales se pueden deducir desde las ecuaciones”, opina Francisco Melo, físico e investigador del Centro de Investigación de la Materia Blanda (SMAT-C) de la USACH y co-creador del modelo matemático.

“Vemos que se confinan acertadamente comunas que contribuyen con un flujo grande de activos, pero por otro lado, se dice que los estudiantes podrían volver al colegio y se habla de la posibilidad de reabrir comercios, entre otras acciones. Entonces, todos nos preguntamos ¿cómo se han obtenido los criterios que indican que las nuevas medidas van a funcionar? (…) hay medidas que se pueden tomar, pero no habrá un control con márgenes de seguridad aceptables sin información cuantitativa”, agrega.

Estado estacionario

En una segunda parte del estudio, los académicos indagaron en el status quo de la pandemia en el país, es decir el momento actual, tras lo cual argumentan que hoy Chile estaría justo en lo que ellos denominan “estado estacionario” de la enfermedad, o en otras palabras, el momento en que el número diario de personas que se infecta es prácticamente igual al de los que se recuperan.

“A nuestro parecer, cualquier enfermedad que tiene una tasa de recuperados y una tasa de contagiados diarios, va a llegar a un equilibrio, si se le ayuda con acciones que restrinjan los contagios. Pero cuando el flujo de contagiados es mayor que el de los recuperados, la pandemia crece; y en el caso opuesto, la pandemia disminuye. Conclusión: desde el punto de vista matemático existe un estado en el cual uno puede lograr que ambos flujos sean parecidos, y ahí estaríamos cerca del equilibrio”, piensa Melo.

“Entonces, a partir de ese estado estacionario podemos hacer los números; el modelo que proponemos es una manera más realista de hacer las cuentas, es decir, consideramos cuántos pacientes nuevos se contagian y los dividimos en grupos: pacientes leves, graves, asintomáticos y eventualmente fallecidos. De esta forma podemos hacer el análisis y el seguimiento de cada población”, añade Juan Francisco Fuentealba, también investigador del SMAT-C.

Rivas Pardo, en tanto, indica que “si nos encontramos en este estado estacionario significa que el sistema de salud no va a colapsar, porque ya está en un estado de equilibrio y los internados  no aumentan”. Fuentealba añade que “un estado estacionario, aunque precario, es más benigno desde el punto de vista de la propagación, porque la tasa de crecimiento del virus cerca de este estado es más pequeña”.

Melo complementa que “en estas condiciones, y desde el punto de vista matemático, el análisis y control de la enfermedad es mucho más simple, lo que permitiría diseñar herramientas para anticipar la progresión de los contagios graves y prevenir el colapso hospitalario en caso que nos alejemos demasiado del estado estacionario”.

Con el instrumento ya diseñado, el propósito de los científicos ahora es compartirlo con la comunidad de especialistas y actores de la salud para proceder a su análisis crítico y su eventual utilidad como una herramienta adicional de predicción. Además, esperan producir informes más detallados en un futuro cercano.

 

Puedes descargar aquí el informe de los científicos.