Investigador dicta ciclo de talleres para niños, a quienes enseña sobre la belleza y el rol de los insectos

La actividad, a cargo de Paul Amouroux, académico del centro Hémera U. Mayor, es un programa elaborado y financiado por la Dirección de Sustentabilidad de la Municipalidad de Vitacura y busca educar a los menores en edad escolar y preescolar sobre los beneficios de la biodiversidad. Los talleres se realizarán hasta diciembre en jardines infantiles y plazas de la comuna de forma gratuita.


 

La primavera trae sol, flores y también muchos bzzzz y cri cri. Pero ¿qué son exactamente y qué hacen estas criaturas que revolotean a nuestro alrededor?

Un nuevo ciclo de talleres entrega información y una experiencia única para mostrar la belleza y el rol de los insectos en la vida cotidiana y la naturaleza en general. La actividad, a cargo de Paul Amouroux, académico del Centro de Observación de la Tierra Hémera U. Mayor, es uno de los programas de la Municipalidad de Vitacura para promover el desarrollo sustentable y sensibilizar sobre los beneficios de la biodiversidad.

“Ha sido una experiencia totalmente diferente, tratando de atraer a los niños y captar su atención, pero tienen muchas ganas de comunicar, les interesa el tema y preguntan”, cuenta el entomólogo.

Aunque los insectos constituyen más del 50% de todas las especies que habitan nuestro planeta y superan el 75% si solo consideramos los animales, la actual crisis de biodiversidad amenaza con reducir drásticamente su cantidad y diversidad.

La desaparición de los insectos puede tener consecuencias devastadoras para los ecosistemas naturales, ya que cumplen un papel fundamental en las cadenas alimenticias y en la descomposición de la materia orgánica. Además, su influencia se extiende a las actividades humanas como la agricultura, donde son esenciales en el ciclo de los nutrientes o la polinización de los cultivos.

Junto con entregar información sobre la diversidad de insectos para que los niños puedan distinguirlos, los talleres les permiten experimentar, observando insectos con lupa, y conocer el rol que tienen en el ecosistema.

Paul Amouroux señala que el propósito es que los participantes “se lleven la sensación de que hay que proteger a los insectos. Puede que algunos sean molestosos, pero sirven mucho para que las aves coman, para que las plantas sean polinizadas, etc., entonces no deben tenerles miedo”.

Para el académico, los talleres han significado una valiosa oportunidad para acercarse a la sociedad fuera de la academia. “Es muy interesante acercarse a la comunidad, de repente nos quedamos adentro de los laboratorios o comunicamos entre académicos e investigadores con un lenguaje muy específico, y hay que saber también cómo hablar con toda la sociedad y dirigirse a niños requiere adaptarse, que es lo entretenido”.

En total el ciclo contempla talleres en 15 jardines infantiles para niños y niñas de entre 3 y 4 años y 4 talleres al aire libre el primer sábado de cada mes a las 12.00 horas en el Mercado Sustentable, que organiza el municipio en el Parque Costanera Sur.