Con moscas y ratones estudian cómo detener ELA y daño a la médula espinal

-Dres. Felipe Court y Mario Sanhueza, están participando en la XIII Reunión Anual de la Sociedad Chilena de Neurociencias, que se realiza en Hotel de la Isla, de Castro.

-Expertos investigan daño neuronal y capacidad regenerativa de estas células.

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¿Por qué las neuronas se dañan frente a enfermedades o el uso de ciertas drogas? o ¿qué procesos están involucrados en la regeneración del sistema nervioso?, son algunas de las preguntas que están siendo abordadas por científicos de todo Chile. Esto, en la Décimo Tercera Reunión Anual de la Sociedad Chilena de Neurociencias, que se realiza en el Hotel de la Isla, Castro, Chiloé. En la oportunidad, los Dres. Felipe Court y Mario Sanhueza, del Centro de Biología Integrativa de la Universidad Mayor, están dando conocer los avances en neurociencia, desarrollados, principalmente, gracias al estudio en modelos como el ratón y la mosca del vinagre. Esta última especie posee cerca del 80% de los genes que producen enfermedades degenerativas como Parkinson y Alzheimer, lo que permite modelar patologías para realizar experimentos, facilitando los ensayos de todo tipo. Dichos hallazgos, podrían tener implicancias terapéuticas, en el manejo de patologías como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), o el daño a la médula espinal.

 

Neuronas y regeneración del sistema nervioso

Durante la jornada inaugural, el Dr. Felipe Court presentó sus estudios sobre regeneración axonal, proceso fundamental en el manejo de enfermedades neurodegenerativas y otros daños al sistema nervioso, como la lesión a la medula espinal. “Mostré trabajos que estamos realizando en nuestro laboratorio, referidos a cómo podemos aumentar la regeneración axonal mediante el uso de células gliales”, explica el investigador. 

Estos trabajos son pioneros y constituyen un nuevo paradigma y mecanismo biológico, mediante el cual, se muestra cómo una célula del sistema nervioso, puede transmitir información genética a otra. “Específicamente, hemos visto cómo esta célula llamada glía, a través de pequeñas vesículas, le transfiere material genético a la neurona, que después esta última utiliza para aumentar su capacidad regenerativa”, comenta el investigador e integrante del Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo, GERO.

El científico indica que estas investigaciones muestran la asociación entre la célula glial y la neurona, y cómo la primera puede modular distintas características morfológicas y funcionales de la neurona, “lo cual es muy importante para entender cómo se estructura y funciona el sistema nervioso. Además, nuestras investigaciones señalan que es posible aumentar la regeneración neuronal modificando células gliales, lo cual podría convertirse en una estrategia para recuperar la función del sistema nervioso, tras el desarrollo de enfermedades”.

 

Explorando el cerebro a través de moscas

Hoy martes, la jornada en Chiloé contará con un Simposio de neurocientíficos jóvenes, espacio en el que expondrá el Dr. Mario Sanhueza. “Mostraré los avances desarrollados en el laboratorio del Dr. Felipe Court y también, daré a conocer mi investigación con la mosca Drosophila Melanogaster, en la que se abordan mecanismos de las neuronas y degeneración de estas células. Actualmente, estoy buscando ciertos elementos y genes que puedan modificar la estabilidad de las neuronas, y a su vez, analizando cómo responden estas células a daños específicos que pueden ser causados por enfermedades o el uso de drogas, entre otros factores”, comenta el científico de la Universidad Mayor.

En ese contexto, el investigador está explorando el universo de genes vinculados al procesamiento de grasas y lípidos,  para analizar las respuestas de las neuronas frente a ciertos daños. “He realizado estudios sobre modificación y respuesta a enfermedades como ELA, observando que si cambiamos la expresión de genes relacionados con los lípidos se podía proteger la toxicidad en una enfermedad, en moscas. En ese marco, realizaremos ciertos estudios, por ejemplo, cambiando la dieta o consumo de lípidos en estos insectos”, señala el científico.

Así, la degeneración axonal y regeneración neuronal son los dos mecanismos asociados a patologías neurodegenerativas, que están siendo estudiados por el equipo de académicos del centro, liderado por el Dr. Court. Utilizando la mosca del vinagre fue posible identificar aproximadamente 70 genes con efectos importantes en la degeneración de neuronas motoras, en los modelos de estudio. “La Drosophila tiene memoria, por lo que es posible analizar como ciertas patologías asociadas al sistema nervioso afectan la memoria en moscas. Además el Dr. Sanhueza ha realizado ensayos locomotores y demostrado que sintomatologías como ELA también se pueden modelar”, explica Court.